El desperdicio de alimentos es un problema importante en la agricultura y en los hogares. Si cultivas tu propia comida, lo último que querés es desperdiciar tu arduo trabajo. La prevención del desperdicio de alimentos en tu jardín comienza con las plantas que elijas y continúa hasta la preservación de sus cosechas. Estos son algunos de los consejos para no desperdiciar la comida en el jardín.
Elegí plantas adecuadas para cultivar
Al planificar un huerto productor de alimentos, es muy importante elegir las plantas adecuadas para los lugares adecuados. Es mucho más probable que se produzcan desperdicios si está cultivando plantas que no se adaptan a su clima, microclima, suelo y condiciones de crecimiento. Piense en cómo puede crear sistemas que no solo proporcionen alimentos hoy en día, sino que también puedan adaptarse a nuestro clima cambiante. Si elige las plantas correctas, es probable que pierda menos y obtenga el mayor rendimiento posible.
Cooperá y compartí
La prevención del desperdicio de alimentos a veces es una actividad individual. Pero a veces la cooperación es clave. En los jardines pequeños, en particular, las personas pueden tener más semillas de las que realmente necesitan. Las semillas generalmente solo son viables durante un cierto período de tiempo. Por lo tanto, intercambiar y compartir semillas entre hogares puede evitar desperdiciar el potencial de las plantas.
Muchos pueden germinar más semillas de las que tienen espacio en sus jardines. Desechar las plántulas de sus cultivos es otra forma de desperdicio de alimentos. Nuevamente, regalar el exceso de plántulas, intercambiar plantas o compartirlas con otros puede evitar el desperdicio.
Algunos desperdicios pueden ocurrir porque los jardineros plantan cultivos, pero realmente no tienen el tiempo o la experiencia para cuidarlos. Una vez más, la cooperación y la colaboración pueden ser clave. La resiliencia significa encontrar formas para que las comunidades trabajen juntas: compartir tiempo, compartir habilidades y compartir conocimientos.
Finalmente, la cooperación y el intercambio son claves cuando se produce un exceso de alimentos. Los excedentes de cultivos particulares se pueden repartir en lugar de desperdiciar. Y las comunidades pueden unirse para cosechar cultivos (como frutas de árboles frutales, por ejemplo) cuando el dueño de la casa no tiene tiempo.
Adoptá un enfoque orgánico para el cuidado de las plantas
La pérdida de plantas productoras de alimentos debido a plagas y enfermedades, o problemas ambientales, es otra forma de desperdicio que debemos evitar siempre que sea posible. A veces, las cosas no salen según lo planeado, pero al adoptar un enfoque orgánico y holístico para el cuidado de las plantas y el control de plagas, podemos reducir las posibilidades de que eso suceda.
Cuidar el suelo (es decir, utilizar métodos de no excavar), utilizar una gestión eficaz del agua y practicar la siembra en compañía, la atracción de vida silvestre beneficiosa, la rotación de cultivos, etc., son solo algunas de las estrategias que ayudan a prevenir la pérdida de plantas productoras de alimentos. en un jardín.
Siembra de sucesión
Incluso cuando crecen con éxito, es muy fácil dejar que los alimentos que producimos se desperdicien. Evitar un exceso de ciertos cultivos puede ayudar a garantizar que se consuman todos los alimentos que cultivamos. La sucesión de cultivos de siembra (lo que significa escalonar las plantaciones) puede ayudar a distribuir sus cosechas, asegurándose de tener cantidades manejables de alimentos en cualquier momento. Esta es una estrategia útil para lechugas y rábanos de crecimiento rápido.
Cosechas escalonadas
Los períodos de cosecha escalonados para ciertos cultivos pueden ayudar a evitar excesos. Un ejemplo de esto es el cultivo de frutos rojos como fresas o frambuesas en diferentes lugares, para que produzcan su rendimiento durante un período de tiempo más largo. Por ejemplo, podría cultivar algunos dentro de un túnel de polietileno o invernadero, y otros al aire libre. Los que se cultivan a cubierto normalmente estarán listos para cosechar un poco antes, y ese cultivo puede estar fuera del camino antes de que los que estén al aire libre estén listos. También puede escalonar las cosechas cultivando diferentes variedades, que maduran en diferentes períodos de tiempo.
Aprovechá al máximo los rendimientos de los cultivos secundarios
Incluso si estás cosechando cultivos y utilizando sus rendimientos primarios, es posible que, sin darse cuenta, estés desperdiciando alimentos. Mucha gente desconoce que se pueden comer otras partes de los cultivos típicos. Por ejemplo, no permitir que las hojas de zanahoria, las hojas de remolacha, las hojas de brassica, las hojas y flores de calabaza ni las vainas, hojas, tallos y flores de rábano se desperdicien.
Reconocer fuentes de alimentos silvestres o no típicas
Es un desperdicio si no se considera otras fuentes de alimentos no cultivadas en su jardín. Muchas «malas hierbas» comunes, desde ortigas hasta dientes de león y pamplina, pueden ser fuentes de alimento. Estos son recursos silvestres que también debemos asegurarnos de que no permitimos que se desperdicien. Esforzarte por reconocer las posibles fuentes de alimentos en las plantas que normalmente se consideran ornamentales. Las hostas, por ejemplo, son una excelente verdura, así como una atractiva planta de follaje para sombra parcial. Y hay muchas flores que se pueden comer.
Planificá y prepárate para la preservación
Una vez que haya cultivado sus cultivos, es importante estar listo para preservar lo que necesita ser preservado. Esto puede suceder de diferentes formas. Puedes congelar, deshidratar o enlatar una amplia gama de productos de la huerta. Asegúrese de comprender cómo hacerlo correctamente y de tener a mano las herramientas y el equipo que necesita cuando llegue el momento.
Aprovechá las sobras y los restos de verduras
Los restos de comida cocida y vegetales sobrantes no deben ser relegados al sistema de compostaje de inmediato. Asegúrese de comer más alimentos o incorporarlos en nuevas comidas para evitar el desperdicio de alimentos, y use restos de verduras para cultivar más verduras, hacer caldo o incluso hacer tintes naturales, etc. Haga esto con sus restos y cáscaras de vegetales
Compostá lo que queda: devolvé el excedente al sistema
Lo que quede debe colocarse en su sistema de compostaje. Asegúrese de tener un sistema de compostaje eficaz para que pueda devolver el excedente al sistema, mantener la fertilidad en su jardín y evitar que los desechos de alimentos terminen en vertederos o incineradores.
Fuente: Treehugger
